- Esta acción plástica colectiva se apropia de los modos de producción de Antonio Caro y su crítica al arte, sus instituciones y a la memoria nacional.
- Cocinar es un ejercicio que permite crear, recrear y repetir recetas que pasan de generación en generación, un proceso similar al ejercicio de repeticiones que Caro ponía en práctica en muchas de sus obras.
Bogotá, junio 22 de 2022
Hasta el próximo 26 de junio, el Museo Nacional presenta la exposición Acción plástica: homenaje a Antonio Caro, que propone hacer versiones de las versiones de Caro, para lo cual fueron seleccionados algunos de sus trabajos en los que se resalta un tema recurrente en su proyecto creativo: la forma como la historia nacional insiste en olvidar otros relatos y sujetos sociales.
La apropiación de la firma del líder indígena Manuel Quintín Lame, la disolución de la cabeza hecha con sal nativa que recuerda a un político nacional, el homenaje a líderes estudiantiles, trabajadores e indígenas desaparecidos, la incautación de la tipografía de una multinacional y el uso de medios e imágenes de la flora autóctona son expresiones de la fisura inevitable que produce el olvido en la memoria nacional. Al sacar a la luz estas historias no oficiales, Caro nos muestra el destino trágico de la memoria de la nación: su imposibilidad de dar cuenta de la multiplicidad de sus historias y lugares.
Las plantas de maíz son un elemento recurrente en la obra de Caro, que, según expertos, empezó a aparecer hacia 1974 como decoración y fondo de sus piezas artísticas. Gracias a una invitación a participar en una residencia artística, realizada por el Museo de Arte y Cultura Popular, adscrito a la Universidad Federal de Mato Grosso de Cuiabá, Brasil, Caro tuvo la oportunidad de reflexionar más detenidamente acerca del maíz y su significado.
Según lo relatado en el Cuaderno 1 del Museo de Arte Moderno de Medellín, publicado de diciembre 2015 a marzo 2016, "Antonio Caro durante este viaje reflexionó sobre las conexiones culturales entre los diversos países de Suramérica, y mientras estaba en el mercado local comiendo pamonha, un plato hecho con pasta de maíz envuelta en hojas de maíz, similar a un tamal, comenzó a pensar en la importancia del grano en todo el continente americano. En Cuiabá diseñó un logotipo del maíz, convirtiéndolo en un símbolo simple, repetible y fácilmente identificable, cargado de alusiones culturales, pero sin un significado específico, una suerte de no-logo (un-logo)".
El maíz hizo parte fundamental de la alimentación y los procesos económicos durante el periodo prehispánico en América. Este es un símbolo que, para Caro, representa a los pueblos originarios en su conjunto y que se volvió una imagen reproducida en múltiples trabajos, como pieza principal o como parte de otras piezas.
En el mismo Cuaderno 1 del Museo de Arte Moderno de Medellín también se señala que, "en agosto de 1983, Caro pintó en la Biblioteca Pública Piloto de Medellín, por primera vez, su nuevo no-logo directamente sobre las paredes, creando un campo agrícola virtual en dos dimensiones, que envolvía el espacio. El símbolo del maíz, que a partir de entonces reproduciría una y otra vez en forma de grabados y pinturas en paredes interiores y exteriores, es un tributo a la persistencia de lo indígena en el hemisferio y funciona como conexión entre el pasado y el presente, algo que Caro ha estudiado en profundidad, producto, entre otras cosas, de la convivencia con los ingas en el departamento de Putumayo durante un año y medio, de 1993 a 1994".
Esta acción plástica es un ejercicio de interacción constante con el público y, por ello, invitamos los visitantes a que desarrollen su propia acción plástica en la cocina, preparando una receta con los elementos que Caro usaba en sus obras, como el chocolate, el achiote, la sal, el tomate y, por supuesto, el maíz. Las publicaciones de fotos o videos deberán subirse a Instagram etiquetando al Museo Nacional como @museonacionalco y usando el numeral #encomemoraciónmía hasta el 25 de junio. Las personas cuyas publicaciones que tengan más "me gusta" serán premiadas con una bolsa oficial de Todo Está Caro de la exposición Acción plástica.
Esta acción plástica estará abierta al público hasta el 26 de junio de 2022, en horario de martes a domingo, de 9:00 a. m. a 5:00 p. m.
Valor de ingreso*
Niños (0 a 5 años): entrada gratuita
Niños (6 a 12 años): $2000
Jóvenes (13 a 17 años): $3000
Adultos (18 a 59 años): $4000
Tercera edad (mayores de 60 años): entrada gratuita
*Aporte voluntario: $1000. Valor sugerido contemplado en el costo de ingreso al Museo.
Entrada gratuita al Museo todos los miércoles de 3:00 p. m. a 5:00 p. m. y los domingos en el horario habitual.
Síguenos en redes sociales:
Instagram y Twitter: @museonacionalco
Facebook y YouTube: Museo Nacional de Colombia
TikTok: museonacionalcol
Mayores informes de prensa:
Diana Carolina Moreno
Museo Nacional de Colombia
[email protected]
WhatsApp: 3195074761
Entérese de las nuevas exposiciones y eventos en su correo electrónico, suscribiéndose a nuestro boletín aquí