Esta obra realizada por Alipio Jaramillo, representa a Jorge Eliécer Gaitán, uno de los líderes políticos más importantes del siglo XX en Colombia. Gaitán fue conocido como El caudillo del pueblo. De cuna humilde, ascendió socialmente gracias a su formación académica. Estudió Derecho y Ciencia Política en la Universidad Nacional de Colombia y en 1926 viajó a Italia para realizar estudios de especialización en Derecho Penal en la Universidad de Roma.

A su regreso al país, en 1928, ocupó altas posiciones en el foro, la política y la docencia universitaria. Como abogado penalista participó en la defensa de los derechos de los trabajadores en calidad de mediador entre las instituciones políticas y el pueblo. En 1933 fundó la Unión Nacional Izquierdista -UNIR- y a finales de la década de 1930 volvió a las filas del liberalismo y  ocupó importantes cargos como la Alcaldía de Bogotá y los ministerios de Educación y de Trabajo. Fue proclamado candidato a la presidencia en 1945 y nombrado como jefe único del partido en 1947. Movilizó amplios sectores populares, especialmente las clases bajas de las ciudades, que vieron reflejadas sus expectativas en un líder que poseía una gran oratoria y que expresaba sus anhelos y esperanzas.

Esta obra fue realizada por Alipio Jaramillo a manera de homenaje al líder asesinado el 9 de abril de 1948 (el propósito original era ubicarla sobre la fachada de la clínica en la que Gaitán murió). Jaramillo recoge aquí su interés por los temas de carácter social que provienen de su relación con la corriente del muralismo mexicano; durante su período de formación en Chile, tuvo la oportunidad de ser discípulo de David Alfaro Siqueiros. A su regreso al país intentó construir un arte nacional al incorporar dentro de su obra los temas relacionados con las clases populares y sus luchas.
 

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