Omitir los comandos de cinta
Saltar al contenido principal

Skip Navigation LinksAlicia_Dussan

Hace 100 años... natalicio de Alicia Dussán de Reichel (Bogotá, 16 de octubre de 1920 - )

 


Centenario del natalicio de Alicia Dussán de Reichel
(Bogotá, 16 de octubre de 1920 - )

 

 

 

  
     

 

 

 

 

 

 



Gerardo Reichel-Dolmatoff
Terraza, sitio 12. Alicia Reichel y Milcíades Chaves con escala
Fotografía blanco y negro
FG-3437
Archivo Fotográfico del Instituto Colombiano de Antropología e Historia

 
  
 
 

Alicia Dussán Maldonado nació el 16 de octubre de 1920 en Bogotá y fue una estudiante destacada del Gimnasio Femenino. Inició sus estudios universitarios en la carrera de Derecho en la Universidad Nacional de Colombia, donde tomó las clases de José Francisco Socarrás, y en 1941 se trasladó al recién creado Instituto Etnológico Nacional (IEN) (Pineda, 2012). Sus compañeros de clase fueron jóvenes egresados de la Escuela Normal Superior e hizo parte del primer grupo de etnólogos en formación, al lado de Edith Jiménez Arbeláez, Blanca Ochoa Sierra, Alberto Ceballos Araújo, Luis Duque Gómez, Gabriel Giraldo Jaramillo y Eliécer Silva Celis.

Vale anotar que las escuelas normales superiores fueron un espacio innovador a inicios del siglo XX. Fueron el campo de experimentación de nuevas tendencias pedagógicas, objeto de atención de las misiones educativas y centro de recepción para expertos de diversas áreas; así mismo, fueron el germen de varias disciplinas que años después se profesionalizaron a través de la creación de departamentos en universidades. Bajo la rectoría de José Francisco Socarrás (1906-1995), la Escuela Normal Superior en Bogotá abrió las puertas a hombres y mujeres de diferentes ciudades. Jóvenes destacados arribaron a la capital animados por la formación y el cuerpo docente que hizo parte de la entidad en los años cuarenta; también se interesaron por la posibilidad de especializarse en psicología, etnología, lingüística o pedagogía. Mujeres destacadas, como Edith Jiménez Arbeláez y Blanca Ochoa Sierra, hicieron parte de la época dorada de este proyecto, camino seguido años después por Virginia Gutiérrez Cancino; todas ellas realizaron también su especialización como etnólogas en el IEN y fueron colegas de Alicia Dussán.
 

  

 

 

 

 



 

Foto Flórez
Mosaico de egresados en Ciencias Sociales de la
Escuela Normal Superior de Colombia

1941
Fotografía en blanco y negro
16 x 11,7 cm
FG-2316
Archivo fotográfico del Instituto Colombiano de Antropología e Historia

 
  
 
 

El interés de Alicia por la etnología y la arqueología venía de tiempo atrás. En 1938 escuchó la conferencia de Paul Rivet “Los orígenes del hombre americano”, durante la Exposición Arqueológica y Etnográfica Nacional, y es probable que visitara la muestra de piezas arqueológicas traídas de las excavaciones recientes en Tierradentro y San Agustín, y observara la Fiesta Indígena, donde participaron comitivas de pueblos indígenas. Antes de iniciar sus estudios en el Etnológico, conoció a Gerardo Reichel-Dolmatoff, quien había llegado recientemente al país y trabajaba para una petrolera norteamericana. Con él compartió el interés por la arqueología y la etnografía, así como una larga vida de investigación en diferentes regiones del país (Pineda, 2012; Barragán, 2013).

Al igual que sus compañeras, Alicia Dussán participó en las primeras expediciones del IEN. A mediados de 1943 viajó al Tolima junto con Roberto Pineda Giraldo, Milcíades Chaves y Gerardo Reichel-Dolmatoff, allí realizaron estudios serológicos y fichas antropométricas, en un tiempo en que la antropología física sirvió a los intereses de reivindicación étnica del pueblo pijao de Ortega, Coyaima y Natagaima. A inicios del año siguiente participó de la expedición a la motilonia junto con Roberto Pineda Camacho, Virginia Gutiérrez y Gerardo Reichel-Dolmatoff; un viaje muy recordado porque contrajo malaria falciparum y tuvieron que llevarla rápidamente hasta Barranquilla para buscar atención médica (Barragán, 2013; Pineda, 2012). A pesar de esto, fue un viaje de investigación que apelaba a distintos intereses, que incluían la conformación de colecciones etnográficas, el levantamiento datos antropológicos y la elaboración de vocabularios (Duque, 1945).
 


     

 

 

 

 

 


 



Pueblo barí
Thread-cross
1944
Tejido
5 x 10,5 cm
Cód. ICANH 44-VII-5293
Instituto Colombiano de Antropología e Historia                                            
      

 
  
 
 

Su larga trayectoria como arqueóloga inició con la compra de una colección de urnas funerarias (Pineda, 2012) y con los trabajos que realizó con su esposo sobre este tema. Publicaron tempranamente un estudio regional de la cuenca del Magdalena, donde los recursos de la investigación fueron diversos y daban cuenta de una práctica emergente: la arqueología profesional. Las excavaciones, los pozos de sondeo y las recolecciones superficiales, fueron complementadas con el estudio de las urnas que hacían parte de las colecciones del Museo Arqueológico Nacional, el Museo de Cartagena y el Museo de los Hermanos Cristianos de la Salle, así como colecciones privadas como las de Arturo Cerón y Bernardo Navarro (Reichel-Dolmatoff y Dussán de Reichel, 1943-1944a).


  
     

 



Julio Racines Bernal (1848 - 1913)
Antigüedades Indígenas. Exposición de Madrid. Serie 4.
Lámina X

Ca. 1892
Copia en albúmina (Papel albuminado / cartón)
26,1 cm x 40 cm        
Número registro: 5523.026   
Museo Nacional de Colombia  

 
  
 
 

Poco tiempo después, cuando Luis Duque Gómez asumió la dirección del IEN, se promovió una serie de cambios direccionados a la creación de parques arqueológicos, museos e institutos en diferentes ciudades y municipios del país. Entre las entidades regionales que se crearon, se encuentran el Instituto Etnológico del Cauca, el Instituto Etnológico del Magdalena, el Instituto de Investigación Etnológica del Atlántico y el Servicio Etnológico de la Universidad de Antioquia (Rodríguez, s.f.). La regionalización de la antropología abrió un espacio de vinculación para los profesionales e investigadores que se formaron y participaron en las comisiones del IEN.

Antes de partir a la costa caribe, Gerardo y Alicia publicaron el n.°1 de  Cultura material, Cuestionario para investigación en el terreno (1946), un ejercicio para caracterizar y guiar el proceso de investigación a partir del planteamiento de un conjunto de preguntas sobre diversos temas como la vivienda, el vestido, la cerámica, la demografía, la alimentación, la geografía, entre otros. Estas herramientas permiten dar cuenta del interés de la pareja por sistematizar la investigación antropológica.
 

       

 



Gérard Mall-Teare ( - )
San Andrés indians in the railroad station of Sevilla
1928               
Copia en gelatina (Emulsión fotográfica / Papel) 
11 x 6,8 cm    
Número registro: 8171
Museo Nacional de Colombia                                                           

 
  

 
 

Cuando se trasladaron a Santa Marta, crearon en agosto de 1946 el Instituto Etnológico del Magdalena, el cual fortaleció considerablemente el campo de los estudios del Caribe. Sin embargo, las dificultades no fueron pocas, como llamó la atención Reichel-Dolmatoff en uno de sus informes, “puesto que la investigación del Departamento del Magdalena en todos sus aspectos arqueológicos, etnográficos, lingüísticos, etc. [...] un personal de dos investigadores se muestra absolutamente insuficiente para una zona tan extraordinariamente interesante para la etnología” (1946, pp. 23-24).

Los trabajos de investigación de Alicia y Gerardo iniciaron en septiembre del mismo año en Pueblito, junto con Milcíades Chaves, quien fue comisionado por cuatro meses por el IEN. Los llamados de atención por falta de fondos y personal fueron constantes durante los años siguientes, de forma que solicitaron constantemente apoyo al IEN. Entre los investigadores que fueron designados para temporadas de campo arqueológicas y etnográficas en el Instituto del Magdalena, se encuentran José María Tamayo, Henry Wassen, Nils M. Holmer y Eduardo Caicedo Luque.

Si bien Alicia no participó en todas las expediciones, se destaca el reconocimiento de sitios arqueológicos que realizó con Gerardo en Durcino, Tamacá y Taganga; en este último lugar, adelantó además


 

el estudio intensivo de los fenómenos socio-económicos de una población indígena aculturada: Taganga. Este estudio enfoca principalmente los aspecto siguientes: distribución de actividades económicas según sexo, y sus consecuencias en la conducta social institucionalizada; función del control de agresión como necesidad económica; formación de la personalidad básica; tests de Rocharch. (Reichel, 1948, p. 27)

 

 

Con esto se abrió un campo que fue profundizado en las siguientes décadas: el estudio de las “sociedades en transición”.

 

  
     

 

 



Abdu Eljaiek (1933 - )          
Taganga
1970   
Impreso (Tinta / Papel)         
33 cm x 48,2 cm        
Número ingreso: 2081          
Museo Nacional de Colombia                                                            

 
  
 
 

Durante cerca de cuatro años realizaron investigaciones etnográficas y arqueológicas en esta región, las colecciones del Museo del Instituto Etnológico del Magdalena se acrecentaron con los estudios y Alicia se encargó de su organización; lamentablemente, luego de su partida el Museo fue saqueado (Dussán de Reichel, cit. en Meisel, 2015). En 1950, decidieron trasladarse a Bogotá y, gracias a una beca de la Wenner-Gren Foundation for Anthropological Research of New York, realizaron una investigación de catorce meses en el municipio de Atanquez, con el apoyo de la Pontificia Universidad Javeriana (Dussán de Reichel, 2012):
 

 

Lo que vimos en Aritama fue cambio. A veces acelerado y a veces retrasado, pero más a menudo simplemente cambio, como ocurriría necesariamente en cualquier comunidad de seres humanos. Por supuesto, a veces este cambio, cuando exigió una elección inusual de acción, afectó profundamente a un individuo, a un grupo o incluso toda la comunidad, pero nunca fue más allá de la experiencia humana común y siempre hubo medios para hacerle frente. Nada se “desintegró”, nada se “descompuso”; tuvo lugar una continua conformación y reformación de las relaciones entre el hombre y el medio ambiente, entre el hombre y la sociedad, entre el hombre y lo sobrenatural, pero simplemente como una parte de la vida, de la vida de cualquier persona en cualquier lugar. (Dussán de Reichel y Reichel-Dolmatoff, 2012 [1961], p. 25)

 

 

 

  
     

 

 

 

 

 




Pueblo ika
Mochila
Tejido
22,5 x 65,5 cm
Cód. ICANH E-62-IV-279
Instituto Colombiano de Antropología e Historia                                                            

 
  
 
 

El trabajo realizado en Atánquez, junto con otros artículos de Alicia publicados en la década de 1950, pueden ser considerados estudios pioneros en las investigaciones sobre campesinos y las llamadas “poblaciones mestizas”. Al finalizar esta labor, se mudaron nuevamente a la costa Caribe, en esta ocasión, a Cartagena, donde vivieron entre 1954 y 1960. Aunque tuvieron la intención de abrir un instituto de investigaciones en esta ciudad, fue un proyecto frustrado; sin embargo, Alicia y Gerardo participaron en las redes intelectuales locales y se vincularon a la Universidad de Cartagena a través de la cátedra de antropología de la salud. Por su parte, las investigaciones arqueológicas y etnográficas realizadas en Bolívar y Córdoba se desarrollaron gracias al apoyo del Instituto Colombiano de Antropología y los fondos personales de la pareja de investigadores (Meisel, 2015). Luego de su experiencia en Cartagena, la pareja de etnólogos realizó un vasto proyecto de investigación arqueológica y etnográfica en la costa pacífica, gracias a una beca de la National Science Foundation, con fondos personales y del ICAN (Barragán, 2012).

La experiencia docente en Cartagena les abrió el camino para lo que fue su gran proyecto educativo, la creación del primer departamento de Antropología en la Universidad de los Andes, tarea que les fue encomendada por el rector del claustro universitario, Ramón de Zubiría. En 1963 se dictaron algunos cursos y se preparó el currículo, de forma que la primera cohorte de estudiantes ingresó a la carrera en 1964. Aunque Alicia se había formado en el IEN, la experiencia de los últimos años, la relación con entidades y la academia estadounidense llevaron a que el programa de estudios siguiera los postulados de la escuela norteamericana.

La temprana participación de Alicia en congresos internacionales de antropología le permitió comprender, desde una perspectiva amplia, el desarrollo teórico y metodológico de la disciplina. Inspirada en los debates y balances realizados a mediados del siglo XX en otros países, elaboró un balance para la antropología colombiana y lo publicó con el título de “Problemas y necesidades de la investigación etnológica en Colombia” (Dussán de Reichel, 2017 [1965]). Allí se evidencia su perspectiva de “etnología de urgencia”, donde hizo un llamado de atención al desarrollo de la “investigación básica”, dirigida a las culturas en vías de transformación o desaparición, diferenciándola de la “investigación aplicada”, realizada por entidades como la División de Asuntos Indígenas.

Los cambios sociales de los años sesenta y el impulso del movimiento estudiantil de aquel entonces dieron lugar a la crítica del proyecto de Alicia y Gerardo, ya que condicionaron la investigación aplicada a la realización de investigación básica, entre otros postulados y relacionamientos. Lo anterior llevó a su renuncia al departamento en 1968, lo que truncó la creación del primer programa de posgrado en antropología en Colombia (Barragán, 2013) y fracturó las relaciones con entidades y universidades extranjeras, principalmente norteamericanas.

A partir de este momento, Alicia se fortaleció como una antropóloga errante, ya que migró entre entidades y áreas de la antropología. Cuando recibió el doctorado honoris causa de la Universidad de Antioquia en el 2010, mencionó que, luego de salir de la Universidad de los Andes, tuvo “que trabajar en muchas cosas interesantes, pero no porque escogiera [...], trabajé en el Ministerio de Educación, en Salud, en mil campos porque necesitábamos comer” (Dussán de Reichel, 2010, p. 23). En las décadas de 1970 y 1980, ahondó su experiencia museológica en Estados Unidos y Colombia asumiendo cargos de investigación, dirección y curaduría; así mismo, trabajó en gestión cultural y relaciones interinstitucionales de academias y entidades colombianas (Barragán, 2013; Sánchez, 2003).

El pasado 16 de octubre Alicia cumplió cien años y gran parte de su vida la dedicó a la antropología. Instituciones como la Universidad de los Andes y el Instituto Colombiano de Antropología e Historia organizaron homenajes en los que participaron familiares, ex-estudiantes y especialistas; el sentimiento que rondó en los eventos dejó en claro la deuda que tiene la antropología colombiana con Alicia Dussán de Reichel, quien es pionera en la arqueología regional, los estudios de campesinos y la museología, entre muchas áreas más.

 

Bibliografía

Barragán, C. A. (2013). El rastro de la arqueóloga, la mirada de la antropóloga: diálogos con Alicia Dussán de Reichel y su obra. Maguaré27(2), 199-253

Duque Gómez, L. (1945). Actividades antropológicas en Colombia 1943–1945. Boletín Bibliográfico de Antropología Americana8(1/3), 21 - 27.

Dussán de Reichel, A. (2010). ¿Qué antropología hacer para Colombia hoy? Alma Mater (589), 22-23.

Dussán de Reichel, A. (2012). Notas a la edición en español. La gente de Aritama. la personalidad cultural de una aldea mestiza de Colombia (pp. 11-14). Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana.

Dussán de Reichel, A. (2017 [1965]). Problemas y necesidades de la investigación etnológica en Colombia. Antropología en Colombia. Tomo 1 (pp. 285-316). Popayán: Universidad del Cauca.

Dussán de Reichel, A. y Reichel-Dolmatoff, G. (2012 [1961]). La gente de Aritama, la personalidad cultural de una aldea mestiza de Colombia. Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana.

Meissel Roca, A. (2015). Los Reichel-Dolmatoff en Cartagena, Colombia 1954 - 1060: excavando en terreno virgen. Baukara, (7), 3-22.

Reichel-Dolmatoff, G. (1946). Informe referente a las investigaciones del Instituto Etnológico del Magdalena en la zona del Cabo de San Juan de Guía durante el mes de septiembre de 1946. Archivo de la Biblioteca especializada del ICANH, REF-0398.

_______. (1948). El Instituto Etnológico del Magdalena (Colombia) en 1948. Boletín Bibliográfico de Antropología Americana (1937-1948)11, 79-81.

Reichel-Dolmatoff G. y Dussán de Reichel, A. (1943-1944a). Las urnas funerarias en la cuenca del río Magdalena. Revista del Instituto Etnológico Nacional1(1), 209-281.

_______. (1943-1944b). Grupos sanguíneos entre los indios Pijao del Tolima. Revista del Instituto Etnológico Nacional1(2), 507-520.

_______. (1946). Cuestionario para investigación en el terreno. Bogotá: Instituto Etnológico Nacional.

Pineda Camacho, Roberto. (2012). La aventura de ser antropóloga en Colombia: Alicia Dussán de Reichel-Dolmatoff y la antropología social en Colombia. Maguaré26(1), 15-40.

Rodríguez, A. (s.f.). Notas para una historia institucional del ICANH. Archivo Biblioteca especializada ICANH, MI-0187.

Sánchez Cabra, E. (2003). El Museo del Oro. Boletín cultural y bibliográfico del Banco de la República.40(64), 3-48.

 

Colecciones: Etnografía y Archivo ICANH;  Historia MNC

Lugar: Museo Nacional de Colombia

Fecha: 16/10/2020 A 31/10/2020

Costo: Homenaje virtual

Curador(es): Aura Lisette Reyes. Curaduría de etnografía. Instituto Colombiano de Antropología e Historia - ICANH



Asociación de Amigos del Museo Nacional


Apoye los programas y proyectos del Museo Nacional y reciba beneficios como invitaciones especiales y descuentos.

Programación Cultural


Exposiciones temporales, conciertos, conversatorios, visitas guiadas, actividades educativas y más.